Hoy da comienzo este nuevo proyecto a través de este blog llamado Grixas Albas. Pretendo con este nombre hacer alusión a mi localidad natal, Villafrades de Campos (Valladolid) y por tanto a mis raíces. El nombre primitivo de Villafrades fue Ecclesias Albas, por sus iglesias blancas, hoy desaparecidas, que resplandecían sobre el amplio horizonte de Tierra de Campos, entre las que destacaba la de Santa María de Grijas Albas, donde se veneraba a la imagen de la patrona la Virgen de Grijasalbas, o de las piedras blancas.
He elegido como icono de este blog la figura de un alquerque medieval, simbolizando mis distintos entretenimientos y aficiones que trataré de ir compartiendo en este blog.
El alquerque de nueve, juego popular durante el medievo, es también conocido como juego del molino, “nueve hombres de Morris” o “triple recinto”. Según las distintas versiones, hay quien especula con que puede estar relacionado con las danzas Morris, muy comunes en toda Inglaterra, ejecutadas por danzantes con palos o espadas en procesiones y otras fiestas populares. Sin embargo, otros autores señalan que nada tiene que ver con esto, y que el nombre del juego procede de la palabra latina «merellus», que significa pieza o ficha de juego, motivo por el cual se le denomina también juego del molino. Sea como fuere, hablando de estas danzas Morris, hilvanando una cosa con otra y alineando de nuevo mis aficiones, me vienen a la memoria otras viejas danzas, más cercanas en este caso como las danzas de palos tan afamadas durante años en los pueblos de Tierra de Campos, y en especial a la de Villafrades, que se celebra durante la festividad en honor a la Virgen de Grijasalbas. Ésta, tal vez sea la que mejor siga conservando actualmente en la provincia de Valladolid, y de forma ininterrumpida, todo su protocolo y ritual.
Volviendo al alquerque, se desconoce el origen exacto de este juego que hizo furor en la Edad Media, aunque parece que fueron los primeros comerciantes griegos y fenicios quienes lo introdujeron en Europa, y se han encontrado versiones más antiguas aún que datan de 1400 a.C. Los musulmanes lo trajeron a la Península Ibérica con el nombre de «quirkat» haciéndose muy popular en el siglo XIV por toda la geografía nacional.
Hoy se pueden ver en la Península Ibérica numerosos tableros tallados en sillares y esculpidos en piedra en atrios de iglesias y catedrales románicas, similares al que por casualidad encontré hace unos meses en un lugar próximo donde estuviese ubicada la antigua iglesia de Grijas Alvas (intencionadamente lo escribo con “v” porque así aparece en los documentos antiguos) de Villafrades. El hallazgo se produjo durante la realización de unas obras con motivo de la concentración parcelaria, en una cuneta de la carretera VA-920.
En cuanto a las normas del alquerque, se considera el antecedente del actual juego de las damas en que dos jugadores disponen de nueve piezas u «hombres», que se mueven por las veinticuatro intersecciones de las líneas del tablero. El objetivo del juego es capturar los peones adversarios y dejar al oponente con menos de tres piezas o sin movimiento posible.